Le cubría de tiernos besos la frente, y con cada de uno de ellos buscaba arrancarle los dolores de la memoria, sacarle los recuerdos que la lastimaban y limpiarle las penas.
Unos besos que le alisaban el fruncido ceño con un "estoy contigo..."
|π$tinto©
Contigo...aquí, donde me dejan
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